Método FlyLady, el ritual para limpiar y ordenar tu casa en sólo 15 minutos

SARA FLAMENCO

Limpiar la casa es un rollo, estamos de acuerdo, pero todas tenemos interiorizado que nuestra casa debería estar limpia. Pero claro, no hacemos nada con tenerlo todo como los chorros del oro si descuidamos el orden, porque una casa desordenada da sensación de abandono y, sí, también de suciedad (aunque no lo esté). Por eso, prestamos mucha atención a las diferentes formas de almacenaje y hace mucho que triunfó el método de Marie Kondo y otros que hemos ido conociendo con el tiempo, como el Oosouji. Pero claro, si no tienes tiempo (o crees que no lo tienes), acabas dejándolo por imposible. Por eso existe una gurú del orden que está a punto de desbancar a la japonesa. Se trata de Marla Cilley y su rutina tiene un nombre: FlyLady. El método FlyLady es ​un proyecto basado en rutinas para mantener todo en orden sin tener que dedicar demasiado tiempo a las tareas del hogar (y así tener tiempo, por ejemplo, para leer la novela del momento: La señora March)

Y es que, según una encuesta realizada por el American Cleaning Institute, una persona puede dedicar hasta seis horas a ordenar cada rincón de su hogar, ya que nos empeñamos en hacerlo todo en un sólo día.

El método FlyLady tiene cuatro mandamientos concretos:

1. Mantén el fregadero limpio.

No es necesario que hagas una limpieza a fondo cada día pero sí es esencial que lo mantengas limpio, vacío y seco. Para Cilley, el fregadero es la zona de la casa que más sensación de suciedad da y la parte que más pereza nos puede dar. Pero si sigues la norma de mantenerlo siempre limpio y, sobre todo, sin cacharros, verás cómo la sensación global de tu casa cambiará.

2. Ponte siempre los zapatos.

Sí, esta norma es muy curiosa. Según la norteamericana, lo mejor es vestirte y ponerte los zapatos nada más levantarte, nada de ir con las zapatillas de andar por casa. ¿Y por qué? Porque así te sentirás preparada para hacer las cosas desde el primer momento. Es algo más mental. Según esta gurú del orden, las personas se sienten y actúan diferente cuando están completamente vestidos, incluso si no salen de casa, para así evitar los pretextos para dejar de hacer alguna tarea doméstica.

3. Dedica sólo 15 minutos al día a ordenar una estancia.

Cómo lo oyes, sólo 15 minutos y sólo una estancia. Además, Cilley te anima a hacerlo con cronómetro para que dejes de recoger cuando suene la alarma. De este modo verás todo lo que eres capaz de hacer en tan corto espacio de tiempo. Según opina la norteamericana, «nuestras casas no se han ensuciado en un solo día. Por tanto, no podemos hacer que estén limpias y ordenadas en un solo día«. Apostando únicamente por una estancia te evitas el andar deambulando de un espacio a otro, lo que hace que pierdas tiempo y te distraigas con otras cosas. Pero sé realista, si tienes una cocina enorme no la vas a limpiar entera, divídela por zonas y «ataca» una cada día.

4. Establece unas rutinas.

Este método te propone dividir tu día en tres franjas: rutinas de mañana, rutinas de tarde y rutinas de noche. Este es un punto clave dentro del método FlyLady, ya que convertir una acción en rutina, hará que lo hagas sin pensar. Pero claro, para eso hay que repetir lo mismo muchas veces y en el mismo momento del día: hacer la cama nada más levantarte, fregar los cacharros del desayuno en cuanto termines...

Además, la norteamericana nos da unas recomendaciones básicas para los que quieran iniciarse en su método:

- Haz la cama todas las mañanas: es básico para que tu habitación no parezca una leonera.

- Identifica los puntos más problemáticos de la casa y dedica dos minutos diarios a ponerlos en orden: la mesa del comedor, la silla de la habitación llena de ropa, el mueble de la entrada...

- Coge una bolsa de basura y tira 27 trastos que no uses: pueden parecerte muchos pero si lo pones en práctica seguro que al final te salen más de 27.

- Limpia el baño (de manera superficial) todas las mañanas: quitar los restos de pasta de dientes del lavabo, los pelos, coloca las toallas...

- Crea un plan semanal para llevar un control organizado: los lunes recojo el mueble del salón, los martes la habitación, los miércoles la encimera... 15 minutos con cada cosa, no lo olvides.

- Establece una rutina nocturna: antes de irte a dormir, dedica 10 minutos a recoger las cosas que están desordenadas. Así preparas tu casa para el día siguiente.

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